En esta vida a la que nos enfrentamos todo los días hay cosas que no comprendo, yo tomé la determinación de no preocuparme mucho por cosas insignificantes y personas que alguna vez pasaron por mi vida pero que se fueron sin dar un adiós, una razón, o un hasta luego .... Ahora me doy cuanta de que , es cierto que en ese momento no me preocupe por ello, pero la cruda realidad que todo eso lo tengo grabado en mi mente y cuando se van sucediendo uno tras otro y otro llega el momento de decir BASTA!!!
BASTA de que la personas se acerquen por interés, con medias tintas, que te utilicen, que te prometan cosas que jamás van a cumplir, que te hagan ilusiones para luego quitártelas de un plumazo.
BASTA del halago fácil, de la mentira para conseguir las cosas o personas, de la hipocresía, del bien quedar por no hacer daño.
¿Cuántas personas han pasado por tu vida haciendo todo esto?
Por la mía por suerte o desgracia muchas , amigas que resultaron no ser tan amigas, chicos que me juraron amor eterno, pero compartido con otras tantas, (eso del amor libre esta de moda de nuevo), cara duras que con halago barato y promesas pensaban conseguir la noche fácil (¿no sabrán que somos nosotras las que elegimos? no ellos), oportunidades de trabajo, te esfuerzas para conseguir ese puesto deseado e intentar ser la mejor (no saben lo que se están perdiendo; otros si lo van a valorar).
¿No sería más fácil ir de frente? Actuar con la verdad por delante, es mucho más honrado que mentir.
Las cosas se pueden hablar, te puedes ir con un hasta luego en lugar de un adiós rotundo.
A veces las verdades duelen pero una mentira, un engaño duelen aún más.
Lo único bueno que se saca de todo esto, es conocer mejor a las personas y estar preparada para afrontar todas estas situaciones y afrontarlas sin ningún tipo de problema.
Todo esto nos ayuda a madurar.
¿No sería más fácil ir de frente? Actuar con la verdad por delante, es mucho más honrado que mentir.
Las cosas se pueden hablar, te puedes ir con un hasta luego en lugar de un adiós rotundo.
A veces las verdades duelen pero una mentira, un engaño duelen aún más.
Lo único bueno que se saca de todo esto, es conocer mejor a las personas y estar preparada para afrontar todas estas situaciones y afrontarlas sin ningún tipo de problema.
Todo esto nos ayuda a madurar.